Respiración nasal

RMR. Rehabilitación masticatoria respiratoria

La respiración oral es la gran pandemia de este siglo. A veces respirar por la boca no es solamente estar con la boca muy abierta todo el día. Respirar por la boca puede ser el simple hecho de no mantener juntos los labios constantemente e incluso tomar bocanadas de aire de vez en cuando. También dormir con la boca abierta es una forma de respiración oral, aunque no seamos conscientes de ello y por el día la mantengamos cerrada.

El simple acto de respirar por la boca puede llevarnos a no oxigenar adecuadamente el cuerpo, lo que podría provocarnos no descansar bien, falta de concentración, cansarnos con mayor rapidez, estrés y un largo etcétera de problemas de salud.

En la boca a edades tempranas nos conducirá a que el paladar se estreche aumentando así la probabilidad de apiñamiento dental.
La respiración oral provoca también que haya inflamación en las encías, boca seca y ardiente e incluso incrementará el número de caries.

La respiración bucal desequilibrará la microbiota oral en el primer tramo del tracto digestivo y entrada principal al resto del cuerpo, con lo que ya podemos intuir la importancia de mantener ese equilibrio para que la microbiota cumpla sus funciones y beneficie nuestra salud.

Es muy importante recuperar esta función y con ella la deglución y la masticación puesto que todas van de la mano. Por eso en Clínica Tábara contamos con personal altamente cualificado para tratar la RMR (Rehabilitación masticatoria respiratoria) y con ello todos los problemas que esta conlleva.

Si estás en alguno de los casos que hemos descrito anteriormente ponte en contacto con nosotros y estaremos encantados de ayudarte en tu recuperación y por fin darte un respiro.

Dra. Ana Fariña n° de colegiado 883

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